Fidelización de clientes en gimnasios
Que la fidelización de clientes es uno de los puntos más fuertes en cualquier actividad empresarial es algo que aquí no se nos escapa y ya te hemos contado varias claves en nuestro blog para trabajarla. Hoy vamos a darte alguna ayuda si gestionas un centro deportivo o un gimnasio, ya que este tipo de empresa busca un cliente donde la relación con él es muy cercana y personal, y donde los abandonos son constantes, con lo que llevar a cabo una correcta fidelización de clientes hará que el gimnasio tenga las salas llenas durante el mayor tiempo posible.
Las clases grupales
Hacer deporte se ha convertido en un acto social, lejos queda la época en la que ir al gimnasio te convertía en el "musculitos". Empezamos a formar parte de una sociedad que cada día comprende mejor lo que es llevar un ritmo de vida saludable y que le gusta reservar un hueco en su rutina diaria para ir al gimnasio o trabajar con su entrenador personal.
De esta manera las clases en grupo son un elemento a tener en cuenta para evitar la deserción de esos clientes inseguros que les falta motivación para mantener la rutina de ejercicio diaria. Estas clases, ya de entrada, se han convertido en tendencia. Pocos gimnasios no ofrecen ya zumba, power plate, acuagym, spinning, bodypump... Como empresarios debemos, además de verlo como una tendencia o una moda, ser capaces de distinguirlas como un factor de fidelización de clientes.
Gracias al apoyo mutuo entre los clientes, la propia motivación que se ejercen entre ellos mismos y además, por supuesto, del propio acto social en el que haces deporte divirtiéndote, charlando sobre lo que has hecho el fin de semana o el partido de la champions de la noche anterior, hacen que emocionalmente los clientes estén felices y esas deserciones que se producen habitualmente en los centros deportivos se vea reducida.
Las clases en grupo nos proporciona además bastantes puntos favorables para la fidelización de clientes, el hecho de que se fomente la amistad y el compañerismo a través de la práctica del deporte en grupo no es solo un valor añadido para el gimnasio y sus clientes, sino que también se consigue que entre ellos se animen a seguir y no dejarlo. Además, se genera una competitividad propia entre compañeros creándose así un vínculo en el que se obligan a asistir para no perder nivel.
Al final, gracias a las clases en grupo, un centro deportivo va a generar más beneficios y va a crecer, porque baja mucho más la posibilidad de abandono o renuncia por parte de los clientes, así que con ellas nos encontramos en una situación en la que tanto el usuario como el gimnasio ganan.
En cualquier caso, no te olvides de llevar a cabo una gestión correcta tanto de la relación con los clientes como de los entrenamientos, o de las clases en sí. Tener el equipamiento adecuado y las salas correctamente habilitadas para la práctica del deporte también serán un punto a sumar a la hora de que el cliente se encuentre cómodo y se mantenga fiel al centro deportivo.
El Entrenador Personal
Si en estas clases contamos con monitores cualificados, y no hablamos solo técnica y físicamente, si no de personal con gran calidad humana, que traten a nuestros clientes de manera atenta, divertida, amable y personalizada, vamos a conseguir no solo fidelizar y tener gente a diario, si no que gracias al boca a boca vamos a poder atraer clientes nuevos que van a mantener las clases siempre con lista de espera. Si te ocurre esto, recuerda que aquí tenemos un software para gestionar clientes, donde puedes medir la relación que tienes con ellos y ayudarte a la hora de gestionar tu centro.
Entrenamientos en solitario
¿Y qué hacemos con los esos clientes que no le gustan las clases del gimnasio? Bueno, siempre va a haber gente que prefiere entrenar en solitario, que para ellos el objetivo del entrenamiento no es ayudarle a llevar un hábito de vida saludable, sino que es un estilo de vida en el que entrenan para ser el más fuerte del mundo o tratar de subir al pódium en la carrera del fin de semana.
Para estos clientes debes llevar un mantenimiento correcto del centro, de las máquinas y de las salas, pero no esperes fidelizarlos a través de clases en grupo, ya que probablemente reciban instrucciones de su entrenador personal vía software o vía whatsapp, o incluso en vivo, donde cobra valor el hecho de tener buenos profesionales dentro del personal como te hemos recomendado en el punto anterior. Entonces, la fidelización debe ser a través de la propia instalación, un "profesional" va a ser complicado que abandone a corto plazo, lo que hay que hacer es mantenerle en las instalaciones, ya que probablemente siga siendo usuario de gimnasios aunque abandone el nuestro.
La música
Para esas personas a las que cuesta motivar y que cambien el concepto de ir al gimnasio como obligación se necesita tirar de motivación extra. Elige bien la música para tus clases grupales y trata de que todo el mundo se sienta a gusto, no elijas siempre la misma. Trata de que los monitores se preparen distintas clases con distintos tipos de música, adaptados así a diferentes tipos de cliente con diferentes gustos musicales. Además, gracias a la variedad conseguiremos clases más amenas y que los clientes no caigan en el aburrimiento de la rutina diaria.
Conclusiones
Lleva a cabo un mantenimiento correcto de las instalaciones para que el gimnasio sea un lugar cómodo, acogedor y donde se pueda hacer ejercicio de una manera propicia para mejorar. Ten un personal humano cualificado, amable y atento, presta especial atención a las clases grupales porque es la mejor manera de restar abandonos de y conseguir clientes fidelizados, ya que las personas que entrenan individualmente no necesitan motivación extra. Y ayúdate de un programa web para poder gestionar correctamente la relación con los clientes, motivar a los que les cuesta más ir y premiar a los más fieles.
